Joaquín Furriel, internado desde ayer en el Sanatorio de Los Arcos luego de sufrir un «infarto isquémico sin daño cerebral», será trasladado hoy de terapia intensiva a una habitación común al haber presentado una evolución favorable, informaron a Télam allegados al actor.
Protagonista de la tira «Entre Canibales», emitida por Telefé, Furriel fue internado ayer en Los Arcos luego de que sufriera un «infarto isquemico sin daño cerebral», en el aeropuerto de Ezeiza al llegar a Buenos Aires procedente de España.
El estado de salud del actor del filme «El Patrón, radiografía de un crimen», de Sebastián Schindel, «está totalmente controlado y permanecerá 48 horas en observación para que el cuerpo médico de la institución pueda realizar todos los estudios necesarios», informó su oficina de prensa en un comunicado.
De todos modos, el actor se encuentra estable y no presenta ningún daño o secuela que pueda impedir el desarrollo de su vida normal y cotidiana.
El infarto cerebral isquémico es un condición que afecta al cerebro y a los vasos sanguíneos, capaz de comenzar repentinamente y desarrollarse de forma rápida, de acuerdo a lo precisado por los facultativos que lo asisten.
De acuerdo a lo precisado por la oficina de prensa, Furriel arribó al país procedente de España y cuando bajó del avión sintió un fuerte mareo, se desmayó en el área de migraciones del aeropuerto de Ezeiza e inmediatamente debió recibir atención médica.
Paola Krum fue una de las primeras en acercarse al Sanatorio de Los Arcos para saber más detalles sobre las salud de su ex pareja, con quien tienen una hija Eloisa.
En mayo de este año Furriel se cayó de espaldas mientras jugaba con su hija en su casa, se quebró una vértebra dorsal, estuvo internado y tuvo que interrumpir las grabaciones de la tira «Entre Caníbales», dirigida por Juan José Campanella, para someterse a un proceso de rehabilitación durante dos meses.
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